'83

Recuérdenme por qué me sumí en esto, por qué elegí ser menos cuando pude abarcar mucho más. Por qué aquel viento en las cavidades sin saber pararnos.
Recuérdenme por qué la dejé hacerme loco cuando me lo advirtió pero ninguno de ustedes me dijo que la locura deshace. Que la locura engancha y que no quiero que nadie la toque. Que ahora me he vuelto uno con ella.
Recuérdenme aquel amargo verano, porque les digo que estoy loco, que ya no veo lo amargo de aquellos números. Ahora recuedo dejes de mar, dejes de viento, dejes de su aliento cuando la llevaba a la espalda. Recuerdo dejes y ninguno amargo. Me creí quizá que mejor haber amado y perdido, qué puto loco.
Dicen ustedes que ella me volvió loco, pero ella solo lo advirtió. Como el viejo que señala que va a llover. Era de noche en el primer día de la feria, me dijo hola, te voy a hacer loco, contesté con mucho gusto. Yo la dejé hacérmelo cuando me hacía el amor, y ahora soy el primero que se señala, loco, loco. Y me río con mi risa de viejo. Qué sabrán ustedes los putos cuerdos. Me dan pena, tan loco me volvió ella.
Qué mal, no les parece.


Comentarios

Lectora azul ha dicho que…
Los locos son más felices, más incluso que los enamorados. Daría mi cordura por perder la cabeza.
Chris ha dicho que…
llega un momento en que entro en este blog con las expectativas muy, muy elevadas. Y, ¿sabes? nunca me decepcionas.
siempre es un placer leerte, Eri.

(vivir sin haber perdido la cabeza no es vivir).
Löva ha dicho que…
Es increíble cómo una persona puede llegar a cambiarte tanto, pero tanto que resulta hasta sorprendente y triste, porque a veces ese cambio no es para bien.

Abrazo de
brownie.