Loables esquinas sumadas al desgaste.
Te llevo al banco más feo del parque y te pregunto si quieres hacer el amor.
Y aunque todo lo que tú sabes se puede resumir en palabras bastas
esta vez te quedas callada.
Apenas puedo recordar cuando me hablabas de magia, porque tus ojos ya han olvidado las chispas. Pero me queda el vestigio y eso arde más que la certeza de los insultos, de tu lengua pervertida, de tu hambre de mí.
La locura adherida a nuestros ojos de llamas extintas, mira, no me importa, somos restos de enormes explosiones. Aunque nos consumimos. Y en el banco nos hacemos el amor hasta que la noche se consume con ambos. Explosionar, nuestra locura.
Y aunque todo lo que tú sabes se puede resumir en palabras bastas
esta vez te quedas callada.
Apenas puedo recordar cuando me hablabas de magia, porque tus ojos ya han olvidado las chispas. Pero me queda el vestigio y eso arde más que la certeza de los insultos, de tu lengua pervertida, de tu hambre de mí.
La locura adherida a nuestros ojos de llamas extintas, mira, no me importa, somos restos de enormes explosiones. Aunque nos consumimos. Y en el banco nos hacemos el amor hasta que la noche se consume con ambos. Explosionar, nuestra locura.
Comentarios
Me has matado con esta entrada, me fascina :3
abrazos (de oso)
Abrazo
explosivo.
Me encanta.