rayo en el corazón

[ While ]

La falda blanca con violetas moradas danzaba con sus miles de vuelos. Mis pies descalzos limpiaban el suelo, y la madera crujía entre paso y paso de baile. La música clásica empapaba cada mota de polvo, cada escondrijo de mi ser. Mi pelo suelto jugueteaba con el ambiente, haciendo hondas de mar, creando tirabuzones de viento. Cogí aire antes de pararme en seco, con los pies totalmente en vertical. Subí la pierna izquierda, preparada para una de mis piruetas, pero la música paró de repente. Silencio.

- ¿Luca? - la voz melodiosa de Rice me tele-transportó veinte años hacia delante - ¿Estás bien? - apagó la antigua gramola de su habitación vainilla.
- Eh, sí - asentí mientras miraba a mi alrededor - Simplemente me sonaba la canción - Miré hacia abajo, pensando en el sueño que dejé escapar por él - Simplemente - susurré antes de mirarle a los ojos.

[ moi ]

Éramos una sinfonía caducada.
La aguja parecía descifrar a los demás, pero se atascaba en nosotros dos. Y dolía. Dolía vernos a medio cantar. Una melodía atascada en la lengua que no llegaba a salir.
Éramos el profundo miedo a ser felices, a no ser nuestros sueños, a que los demás acertasen. Y tú cogías el disco rayado, lo cargabas en el gramófono, y soltabas:
«Hoy vamos a ser constelaciones».
Ellos creen que algo así me mataría, y creo que tienen razón.
Pero no atendías a razones y se me pegaba tu baile de circo. Y me hacías creer en promesas de carpas y payasos, y leones y elefantes, y palomitas y gente allí para aplaudir, para aplaudir (nos).
Comprendí que no estaba tan mal cuando aprendí tu manera de decir »te quiero», un ramo de pétalos a medio arrancar por delante de ti.
- Tulipanes - y la sonrisa para devorar dispuesta para mí - , tus preferidos.

Un adverbio hecho de nutella y nubelosa experta en monstruitos traen dos ideas 
sacadas de la imagen (cedida junto a mi frase final por un albaricoque :)